Zixun dijo de nuevo: "Había una vez un hombre que vendía su arte en las calles de Chang'an. Realizaba un espectáculo de ratones. Llevaba una bolsa en la espalda con más de diez ratones pequeños. Cada vez que llegaba a un lugar con mucha gente, sacaba un pequeño escenario de madera y lo colocaba sobre sus hombros, pareciendo una pequeña casa de teatro. Luego, golpeaba el tambor y comenzaba a cantar una antigua ópera. Justo cuando comenzaba a cantar, los ratones salían de la bolsa, llevando máscaras falsas y vestidos con trajes de teatro, subían al escenario desde la espalda del artista callejero y bailaban de pie como personas. Además, las emociones trágicas y alegres de los hombres y mujeres en la actuación coincidían perfectamente con la trama de la ópera que el artista callejero cantaba."

Suscríbete a nuestro boletín de noticias y mantente al día.

Suscríbete a nuestro boletín para recibir las últimas noticias y actualizaciones sobre nuestro trabajo directamente en tu bandeja de entrada.

Oops! There was an error sending the email, please try again.

¡Genial! Ahora revisa tu bandeja de entrada y haz clic en el enlace para confirmar tu suscripción.